El objeto tiene dos tiempos de vida; el tiempo de duración de sus materiales, es decir el tiempo de vida físico y el de ahora que es la vida del objeto que esta más en su capacidad significativa que en la duración de su materialidad, es por ello que cuando adquirimos un objeto, lo apropiamos, lo exploramos en general, miramos sus significados,  es ahí cuando lo utilizamos, hasta aburrirnos de el, esto es el tiempo de vida significativo, es decir que se ha agotado su significación o sencillamente han cambiado las expectativas, entonces se necesita cambiar por otro. Es así como el objeto se puede entender como una cultura material o como un discurso formal que surge para representar determinadas condiciones culturales y para intervenir situaciones sociales, mientras que la cultura es ese conjunto estructurado de maneras de pensar, sentir y obrar, a partir de modos sígnicos y simbólicos, que se relacionan con tres variables: una colectividad toma un entorno natural y crea un entorno artificial en donde se origina todas la relaciones sintaticas.

El objeto tiene varios contextos; El objeto aparece a partir de las relaciones socioculturales, desde donde se hace un reconocimiento de los valores de la cultura y es por ello que a partir de las relaciones sociales crean dos tipos de redes, la red simbólica  que son los valores generales que componen un grupo determinado (valores subjetivos) y la red sígnica que está conformada por los valores particulares de cada microcontexto (valores objetivos),  es así como estas redes crean los códigos individuales, colectivos y públicos. De igual manera que el objeto también tiene la responsabilidad de ser recurso de interpretación cultural o socio-cultural, en donde se debe saber las ideologías de cada grupo para representar las expectativas, teniendo en cuenta que la ideología del objeto es tridimensional que estructura una cultura material que es la materialización de las esperanzas que tiene un grupo, y que por lo tanto es un constructor que revela las estructuras cognitivas del mismo y que por lo tanto su forma es un hecho social de convivencia.

Se vive en medio de tres procesos de culturización: Las Identidades particulares, que habla sobre como cada grupo social tiene diferentes o similares esperanzas y enfoques para colmarlas, es por ellos que el mercado de los objetos culturales es tan amplio como global. Tambien a partir de la cultura global, que es el recurso a través del cual se han sostenido el desarrollo, la oportunidad, los alcances y accesos aparentemente infinitos de la información,  puesto que lo fundamental es que las culturas sean capaces de asimilar toda la información que se mueve, enriqueciéndose mutuamente y por ultimo la hibridación cultural que es el proceso de mezclas culturales entre identidades particulares y estas con los mass media, es por ello que entre dos culturas particulares, se hibridan valores de cada una.

La perspectiva estructural del objeto como origen de la forma, que es la perspectiva que tiene una visión estructural del objeto que trataría sus relaciones internas (intraformal) o sus relaciones externas; en donde el intercambio de información es significativa y formal y existe también (interformal) con otros objetos, humanos y contextos, que tiene el objeto como parte de una estructura mayor, la forma sobrelleva una autosignificación y cierta parte mensaje. 

El objeto esta conformado por tres subestructuras inseparables en la forma (física, significativa y morfológica), pero que científicamente se aíslan para comprenderlas y controlarlas.

⦁ La estructura física que son las fuerzas que enfrenta la materialidad, efectos físicos de la materia, trata la durabilidad, resistencia y el tiempo de vida físico del objeto.

⦁ La estructura significativa es considerada virtual en el objeto, no se puede aprehender, debido a que porta todos y cada uno de los significados o mensajes del objeto, dándole un origen específico y determinado a la forma que es su configuración.

Se encuentran componentes informativos esenciales, inseparables también en su uso pero categorizables y legibles (función, técnica, tecnología, praxis, semiótica, estética) es por ello que la función suple necesidades naturales, es decir que la forma es un extensor de las posibilidades apaptativas básicas. 

Mapa mental II